La senadora por el distrito de Arecibo, Elizabeth Rosa, iniciará sus labores atendiendo el tema de las escuelas abandonadas por el Departamento de Educación (DE) luego del cierre de cientos de escuelas e investigando además el status de las mismas en estos momentos.
“Algunos de estos planteles están bajo la jurisdicción del DE y otras bajo el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), de cualquier manera, es inaceptable que tengamos estructuras abandonadas que desde el día de su cierre debieron ser transferidas a entidades sin fines de lucro o a los municipiospara el desarrollo de proyectos comunitarios y estableciendo centros comunitarios. Aunque algunas de las estructuras han sido transferidas, quedan tantas otras que vamos a buscarle un uso productivo para el futuro”, destacó la también trabajadora social clínica, Elizabeth Rosa.
La burocracia gubernamental ha sido el primer escollo para llevar a cabo iniciativas productivas para esas estructuras que sirvieron como escuelas. “Para citar un ejemplo, los alcaldes de Cataño y Loíza solicitaron planteles abandonados para establecer centros de usos múltiples y en el caso concreto de Loíza, la alcaldesa estuvo cerca de dos años solicitando yreclamando, hasta que finalmente logró su propósito. En el Barrio Mariana de Humacao, se creó un espacio cultural para el entretenimiento, la educación integral y centro de acopio ante un desastre natural, por medio de un grupo comunitario. En el barrio Bartolo, en Lares, la antigua Escuela Manuel Rojas Luzardo, ahora se provee techo a unas siete familias. Ejemplos como estos los podemos replicar en nuestro distrito”, abundó.
Se estima que aproximadamente unas 500 escuelas el Departamento de Educación ha cerrado en Puerto Rico desde 2015. En el Distrito de Arecibo, aproximadamente unas 49 escuelas, han sido cerradas por el DE y no se la ha brindado un uso alterno y por el momento se encuentra abandonados convirtiéndose en un estorbo público. Un reportaje de Tatiana Díaz Ramos para el Centro de Periodismo Investigativo reveló (CPI) que el proceso de aprobación para vender escuelas públicas para allegar recursos al Gobierno, tuvo un aumento considerable de transacciones desde el verano de 2019. Sin embargo, solamente un 4 por ciento de los 960 planteles que distintas administraciones han cerrado durante la última década se han convertido en ingresos para el erario.
“Aunque la meta inicial del gobierno era vender las estructuras para allegarse recursos, lo cierto es que no hay nada más caro y perjudicial que dejar estas escuelas abandonadas a su suerte. Mi compromiso es que en conjunto con los municipios y el gobierno central, podamos estructurar proyectos para que los grupos comunitarios y los municipios le brinden una vida útil y en provecho del Distrito de Arecibo”, señaló la senadora Rosa.