El Coliseo José Miguel Agrelot y la Bahía Urbana, dos de los espacios más importantes dedicados a la cultura y el entretenimiento en Puerto Rico, podrán regresar al estado que tenían antes del huracán María gracias a una obligación de alrededor de $6.5 millones de la Agencia Federal para el manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).
Esta partida ayudará a que las instalaciones estén en mejores condiciones para enfrentar futuros desastres. En el caso del icónico Coliseo José Miguel Agrelot, conocido como el “Choliseo”, la asignación de alrededor de $4.9 millones está destinada a obras permanentes.
“La reconstrucción de estos lugares forma parte de la recuperación del sector económico de la isla y a su vez nos encamina a un futuro donde contamos con estructuras más resilientes. Sin duda, estos fondos ayudarán al desarrollo de este renglón que tanto nos aporta”, comentó el Coordinador Federal de Recuperación de Desastres para Puerto Rico, José G. Baquero.
Según la administración del Distrito de Convenciones, quien maneja ambos espacios, la industria del entretenimiento en Puerto Rico produce unos $2 mil millones al año y genera unos 30,000 empleos, directos e indirectos.
Algunos de los trabajos para los que se destinaron fondos incluyen la remoción y remplazo de paneles de cristal, equipo de sonido, alarmas contra incendios y techos acústicos, entre otros. Además, se destinaron $13,000 para la adquisición de protectores de voltaje para las luminarias, y el remplazo de los plafones del techo por unos a prueba de agua.
La directora ejecutiva de la Autoridad del Distrito de Convenciones de Puerto Rico, Mariela Vallines Fernández aseguró que el impacto de las obligaciones federales es significativo. “Estas instalaciones compiten a nivel mundial cuando las personas toman decisiones de adónde quieren ir y adónde quieren viajar, son factores que evalúan a la hora de ver que esas instalaciones estén en buenas condiciones. Y nosotros poderles presentar unas instalaciones de primera a ese turista, representa que podemos competir de tú a tú con cualquier otro destino turístico”, expresó.
Además, Vallines Fernández explicó que otras industrias también se benefician de forma indirecta, como la transportación, construcción y gastronomía, por mencionar algunas.
De otra parte, Bahía Urbana, un moderno concepto de unos 87 acres que abarca áreas de descanso frente al mar y espacio para eventos artísticos, cuenta con una obligación de $1.6 millones. Con los fondos se repararán el sistema de bombeo de las fuentes de agua, los suelos de resina, los adoquines y el cableado eléctrico en la zona del muelle, entre otras mejoras.
El Ing. Manuel A. Laboy Rivera, director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia de Puerto Rico (COR3, por sus siglas en inglés), agradeció la obligación de fondos destinados a la recuperación de la infraestructura de estos dos importantes espacios que permiten el desarrollo cultural que tanto atrae al turista extranjero como local.
“Confiamos que las visitas a estos centros que fomentan el quehacer cultural superarán su auge previo a la pandemia del Covid-19, una vez se controle su propagación. Desde el COR3 apoyaremos al personal de la Autoridad del Distrito de Convenciones de Puerto Rico en los procesos relacionados a la recuperación de estos icónicos espacios”, concluyó el ingeniero.
