Con el proyecto se otorgarían permanencias y los más de 200 empleados participantes recibirán una remuneración adicional mientras que las unidades también obtendrán incentivos
La Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico aprobó, ayer en la noche, la propuesta de un proyecto piloto de Servicios Compartidos.
La iniciativa pretende atender los señalamientos de altos niveles de duplicidad en liderazgo administrativo a través del sistema, la redundancia en funciones de apoyo, las dificultades para cumplir y monitorear procedimientos y políticas financieras, así como la pobre coordinación entre las unidades.
La propuesta procura una transformación administrativa mediante la reingeniería de la operación y prestación de algunos servicios en tres unidades con una inversión de $1.4 millones anuales. Con esta inversión se espera fortalecer la plantilla de personal e incentivar la colaboración entre oficinas y unidades. La Oficina de Transformación Institucional ofrecería recursos y presupuesto para acelerar y concretar la ejecución del plan piloto. Esta oficina destinará $1.7 millones para este proyecto durante los años fiscales 2022 y 2023.
“El piloto se implementaría en las unidades de Arecibo, Aguadilla y Utuado. Se tomaron en consideración aspectos como la cercanía geográfica, datos demográficos y el historial de colaboraciones previas informales que ya tienen estas unidades entre ellas. La intención es adecuar la estructura operacional al tamaño, demanda y servicios actuales y de cara al futuro. Esperamos sacar lecciones aprendidas de esta implementación para escalarlas a nivel del sistema. La implementación del proyecto está fundamentada en un plan de incentivos a los empleados y unidades participantes. Esta es una transformación exclusivamente administrativa que no atiende aspectos u operaciones académicas”, explicó la Dra. Mayda Velasco presidenta de la Junta de Gobierno.
El proyecto piloto, que no contempla despidos, cierre ni consolidación de unidades, se diseñó luego de un cuidadoso análisis de los datos recopilados a partir de un extenso proceso de consultas y entrevistas con el personal administrativo de las tres unidades que participarían del modelo. Con la propuesta de servicios compartidos se busca atender la caducidad de algunos aspectos del diseño operacional del sistema Universitario que ya no responden a las necesidades actuales.
Transformación incentivada:
El piloto dispone que el empleado participante será remunerado y la unidad será incentivada por participar del proyecto piloto. El proyecto involucraría a 541 empleados, 149 puestos y 94 oficinas entre las tres unidades participantes. Se crearían 164 plaza permanentes,137 empleados recibirían aumentos de retribución y 204 empleados podrían recibir diferenciales por funciones que excedan sus deberes actuales. La implementación del mismo se prevé comience a partir del próximo semestre.
La necesidad de la transformación administrativa del sistema UPR es parte de la conversación constante en la opinión pública y entre la comunidad universitaria desde hace años. Es un imperativo tanto desde el punto de vista académico como administrativo. Los indicadores sociales y del sistema también dan cuenta de lo apremiante que resultan en este contexto las reformas estructurales.
“A nivel sistémico, la Universidad ha perdido en los últimos cinco años 28% de su matrícula, 28% de su plantilla (por “attrition”, no por despidos) y 51% de asignaciones del Gobierno Central. A ese escenario se suma una tendencia demográfica a la baja y una fuerza laboral que en promedio ha rendido ya 17 años de servicio y cuya mitad estaría en condiciones de retirarse en los próximos cinco años. Ante ese cuadro, no hay forma de que tenga sentido mantener la misma estructura operacional. Este no es un problema esencialmente fiscal sino de diseño y de sostenibilidad. Cuando miramos los recintos de manera individual los números son mucho más dramáticos en algunos de ellos y ese es el caso de las unidades que son parte del piloto”, abundó Velasco.
En cuanto a la matrícula, Arecibo ha experimentado una merma de 26%, Aguadilla 37%, mientras que Utuado tiene 67% de estudiantes menos. En lo que concierne a sus presupuestos, Arecibo ha experimentado una reducción de 16%, Aguadilla 11% y Utuado 23%. Estos datos llevan a un aumento en costo por estudiante que en Arecibo se traduce a un alza de 13%, en Aguadilla alcanza el 41%, mientras que en Utuado esto se traduce en un aumento de 133% del costo por estudiante.
Con nueva rectora el Recinto de Ciencias Médicas:
Por otra parte, con 8 votos a favor, 3 en contra y 3 abstenidos, el cuerpo rector ratificó el nombramiento de la Dra. Ilka Ríos como rectora en propiedad del Recinto de Ciencias Médicas. La trayectoria de la Dra. Ríos incluye haber sido vicepresidenta interina de la Universidad de Puerto Rico entre julio de 2017 y julio de 2018. Asimismo, ha ocupado el puesto de Decana de Asuntos Académicos y de Estudiantes del Recinto de Ciencias Médicas.
Desde el pasado mes de mayo, el puesto había sido ocupado interinamente por la Dra. Wanda Maldonado, quien no resultó favorecida en la votación de la Junta de Gobierno para ocupar el puesto en propiedad.