Recomiendan uso de mascarillas transparentes para atender a personas audioimpedidas

Defensoría de las Personas con Impedimentos expone argumentos.

La realidad de la pandemia del Covid-19 ha impuesto diversas situaciones que afectan a todas las personas, particularmente a quienes tienen algún impedimento, como las personas audioimpedidas. Ante dicha realidad, la Defensoría de las Personas con Impedimentos (DPI), recomendó a todas las personas que atienden público, que hagan uso de mascarillas transparentes, para poder relacionarse efectivamente con las personas audioimpedidas, que necesitan leer los labios para establecer una comunicarse de manera efectiva.

El defensor de la DPI, Gabriel Corchado Méndez, señaló que “es mandatorio que todos tengamos todas las protecciones relacionadas a la pandemia, como el uso de las mascarillas, pero como parte de nuestra misión de defensa de las personas con impedimentos, estamos procurando que las personas que atienden público, tanto en el servicio público como en las empresas privadas, hagan uso de las diversas variedades de mascarillas transparentes, de manera que podamos servir adecuadamente a la población audioimpedida”.

 

La Defensoría añadió que no está solicitando la supresión de las mascarillas del personal que atiende público, si no que utilicen los escudos o mascaras transparentes cuando es evidente que se está interviniendo con un sordo. “En estos casos es importante ejercer el sentido común, y el principio de facilitar a las personas con impedimentos que tengan un acomodo razonable y la atención a sus reclamos”, señaló Corchado. El defensor mencionó además que al servirle a un ciudadano, la persona que atiende, contando con una barrera protectora acrílica, al usar una mascarilla regular, puede removerla parcialmente para que la persona con impedimento auditivo pueda hacer la labiolectura correspondiente.

A esos efectos, la DPI ya emitió un documento a nivel de todas las agencias del gobierno, para que se aplique esta recomendación, y evitar malentendidos lo cual degenera en conflictos entre funcionarios gubernamentales, e incluso, con agentes del orden público con personas sordas. “Lo que buscamos es promover la buena comunicación en conjunto con las protecciones de salubridad. Hagamos uso del sentido común y el principio de cooperación”, finalizó Corchado Méndez.

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