El secretario del Departamento de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández, informó que la Unidad Especializada de Violencia Doméstica, Delitos Sexuales y Maltrato de Menores de la Fiscalía de Ponce presentó cargos esta noche contra José A. Muñiz García, imputado de estrangular a su pareja y agredir a dos guardias de seguridad del hospital donde esta se encontraba recibiendo tratamiento médico tras el incidente.
Los fiscales Tasha Cruz Rodríguez y Jorge Martínez Rivera le formularon un cargo de maltrato agravado, según dispuesto en el artículo 3.2 de la Ley para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica. Además, le presentaron dos cargos de agresión y un cargo por infringir el artículo 6.06 de la Ley de Armas relacionado con el uso de arma blanca.
El juez Ángel Candelario, del Tribunal de Primera Instancia de Ponce, determinó causa para arresto por todos los delitos presentados por el Ministerio Público y le fijó una fianza global de $200, 000 al imputado. La vista preliminar se programó para el 30 de mayo.
“El estrangulamiento es la forma más letal de violencia doméstica. En este caso la víctima es sobreviviente de estrangulamiento no fatal, pero definitivamente corre peligro inminente. Por esto, habiendo obtenido la prueba requerida, la Unidad Especializada de la Fiscalía de Ponce presentó cargos de inmediato. Los casos de violencia doméstica son prioridad en el Departamento de Justicia y continuamos implementando herramientas para optimizar su procesamiento”, manifestó el secretario.
Las mujeres que experimentan estrangulamiento no fatal por parte de su pareja tienen 700 veces más probabilidades de ser víctimas de feminicidio, según estudios publicados por Johns Hopkins Center for Global Health y utilizados por el Training Institute on Strangulation Prevention (TISP).
Tomando en cuenta estos impresionantes datos y dirigido a evitar la muerte de mujeres y otras víctimas de crímenes violentos, desde el año pasado el Departamento de Justicia incorporó una nueva herramienta en los protocolos de las investigaciones que realizan las unidades especializadas de Violencia Doméstica, Delitos Sexuales y Maltrato de Menores, mediante un acuerdo con el TISP. Se trata de un instrumento que permite que los fiscales puedan identificar los perfiles de asesinos en potencia y reforzar el procesamiento criminal de los casos donde la víctima alegue que la han estrangulado.
A través de este esfuerzo, el Departamento de Justicia ha adiestrado a los fiscales para el manejo de esta herramienta, creada y revisada por peritos forenses de distintas áreas de la investigación criminal, que se integrará a la metodología de investigación, de manera que se pueda identificar a los agresores más peligrosos y prevenir feminicidios. Además, mediante esta iniciativa se les brindará a las víctimas los servicios de salud que necesitan tras un incidente de estrangulamiento no fatal, ya que pueden tener consecuencias en su salud a corto y largo plazo.