Proyecto Dignidad repudia la orden impuesta por el presidente de la Cámara de Representantes, Rafael “Tatito” Hernández Montañez, obligando al uso de mascarillas en las facilidades físicas de dicha rama de gobierno.
“Estamos conscientes que hay personal que al presente ha optado por continuar con el uso de la mascarilla. También, se respeta a aquellos empleados, funcionarios o ciudadanos que voluntariamente escogen utilizarlas. Ahora bien, que se prive a los ciudadanos, empleados y hasta funcionarios electos del acceso a las facilidades de la Cámara de Representantes, incluyendo el hemiciclo, es una crasa violación a los derechos individuales de las personas en una democracia representativa como la nuestra. No podemos quedarnos impávidos ante estos atropellos que el pueblo lleva padeciendo desde el 2020.”, explicó la Lcda. Lisie Burgos, portavoz y legisladora de Proyecto Dignidad.
“Nosotros apoyamos las libertades constitucionales de Lisie Burgos en su decisión informada y consciente de no utilizar la mascarilla, al igual que defenderemos a todos los ciudadanos que de manera informada y consciente así decidan no hacerlo. El gobierno, en su gestión constitucional, está impedido de infringir las libertades individuales de sus ciudadanos. Nos oponemos a este tipo de medidas impositivas sobre la obligatoriedad de uso de mascarilla y siempre defenderemos el derecho de los ciudadanos a ejercer su libertad de escoger si usa una mascarilla o no.” expresó Javier Jiménez, presidente y candidato a la gobernación por Dignidad.
Como partido político, Proyecto Dignidad tiene como objetivo defender las libertades individuales que protegen a los ciudadanos bajo un sistema constitucional republicano de gobierno. En estos asuntos el Estado tiene la función de brindar información fidedigna y certera a las personas de manera que puedan tomar decisiones y asumir responsabilidades, no de imponer mediante decretos de obligatoriedad el criterio de los funcionarios de gobierno de turno.
Proyecto Dignidad es un partido político que busca provocar cambios beneficiosos en la sociedad puertorriqueña a corto y largo plazo. Surge como respuesta a las malas prácticas de los distintos gobiernos de las pasadas décadas. Durante mucho tiempo se ha delegado en los partidos tradicionales el bienestar de la vida puertorriqueña y los mismos han fallado repetidamente, llegando al punto de destruir al país, lacerando y devaluando su dignidad como pueblo. Ciudadanos preocupados, de distintos sectores y profesiones han decidido organizarse para gestionar y provocar cambios que redunden en beneficio para Puerto Rico.
El objetivo es transformar las malas prácticas del gobierno que han llevado a la Isla a una quiebra moral, social y económica. Como partido civil de valores conservadores Proyecto Dignidad constantemente somete propuestas para todas las áreas de la sociedad, afirmando que el esfuerzo del gobierno debe estar dirigido a lograr el bien común para las familias y las comunidades.