El Proyecto Matria trabajará en conjunto con Jesús Obrero Cooperativa para que las participantes de sus programas en contra de la violencia de género adquieran conocimientos en manejo de las finanzas, acceso financiero a productos para la adquisición de vivienda y a microcréditos empresariales para el desarrollo de negocios.
Con esta alianza nace también la iniciativa El cambio empieza en mí, un programa de responsabilidad social en la cooperativa, que consiste en una serie de talleres para los empleados y empleadas, cuerpos voluntarios y la comunidad general, a cargo de los recursos del Proyecto Matria. Este esfuerzo está dirigido a entender las dinámicas y el manejo de la violencia, las perspectivas de género y derechos humanos.
Amárilis Pagán Jiménez, directora ejecutiva de Proyecto Matria, destacó que cuando la organización se fundó en el 2004, reconocieron que la falta de educación financiera y la falta de destrezas para desarrollo económico eran algunos de los factores para que las mujeres permanecieran en relaciones de violencia. Destacó que si queremos trabajar el tema de violencia hacia las mujeres se tiene que adelantar medidas de equidad como esta iniciativa.
“Ya comenzamos un primer taller a las empleadas y empleados de la cooperativa. Y a cambio de estos vamos a ver un proceso de educación a nuestras participantes. Vamos a explorar la alternativa de microcréditos empresariales y a la vez buscar la manera de iniciarlas en el proceso de compra de una vivienda”, sostuvo Pagán Jiménez.
Por su parte, Aurelio Arroyo, presidente ejecutivo de Jesús Obrero Cooperativa, indicó que se busca trabajar el tema de la violencia de género a través del empoderamiento de las personas que reciben servicios en el Proyecto Matria mediante la independencia económica.
“Con esta alianza promoveremos los valores del cooperativismo como la equidad, la diversidad e inclusión financiera. Ambas instituciones compartimos la misión de lograr, mediante los servicios que ofrecemos, la independencia y bienestar financiero de las participantes y de las comunidades a las que servimos. Con este acuerdo, perseguimos lograr una sociedad más equitativa e inclusiva y que permita la erradicación de la violencia de género, la marginación y fomente el pleno desarrollo social y económico de los que convivimos en la Isla”, señaló.
Asimismo, el líder cooperativista mencionó que la institución que dirige brindará servicios de educación y “coaching” financiero a las participantes de los programas del Proyecto Matria. Además, ofrecerá asistencia a las participantes de los programas de Matria, para que puedan acceder a vivienda accesible que brinde estabilidad financiera y socioeconómica a las familias impactadas.
“En esta coyuntura es importante resaltar que las cooperativas son empresas sociales cuyo afán no es el lucro sino el bienestar común de sus socios y la comunidad a la que le sirve. Entre el Proyecto Matria y nuestra institución hay una gran coincidencia de propósitos. Por esto nos hemos comprometido en crear un programa de microcréditos empresariales para asistir al desarrollo empresarial y social de las participantes, a la vez que descubren los beneficios que ofrece el modelo cooperativo en la isla. Mientras hacemos eso, nuestros empleados y empleadas, y socios tendrán la oportunidad de recibir a cambio educación en áreas importantísimas como es la equidad, prevención de violencia de género y derechos humanos. Eso es un gran paso y estamos muy satisfechos con este junte”, concluyó Arroyo.