Defendiendo la Cueva del Indio-681 (DCI-681), grupo de base comunitaria por la defensa del patrimonio nacional y el litoral costero por el que se nombra, se solidariza con las víctimas de las agresiones de la guardia privada en Cueva Las Golondrinas en Aguadilla a finales del mes pasado ante los inicios de sus procesos en el Tribunal de Primera Instancia de Aguadilla.
El pasado domingo, 29 de enero un guardia privado de la compañía SJA Security Police abrió fuego a mansalva contra un grupo de ciudadanos al borde de un acantilado durante una manifestación pública en Cueva las Golondrinas. El compañero activista ambiental Ángel L. Torres (“Ritchie”) recibió una herida de bala con un arma 9 milímetros en su pierna mientras caminaba de espaldas, descalzo y portando una bandera en medio de una manifestación en denuncia de la usurpación de bienes patrimoniales.
“Como colectivo y organizadores comunitarios nos solidarizamos con el compañero Ritchie y los compañeros y compañeras del Campamento Carey. Mucho más que la destrucción de nuestros recursos naturales, este sentido de impunidad de parte del privado y la inacción de la Policía amenazan la vida democrática de nuestro país”, declaró Lauce Colón Pérez, portavoz del DCI-681.
“La manifestación convocada por el Pueblo no fue atendida por la Policía de Puerto Rico a pesar de estar al tanto de la misma y presente a poca distancia del lugar de los hechos. No hubo presencia de oficiales de la ley ante el reclamo público y la continuidad de la confrontación de parte de los vigilantes privados”, continuó Colón Pérez.
Este jueves, 9 de febrero, las seis (6) personas arrestadas por alegada obstrucción a la justicia tienen vista en el Tribunal de Aguadilla. Simultáneamente, se convocó una manifestación para reclamar justicia ambiental y protección a nuestros derechos civiles, rechazando el abuso de poder y fuerza por parte del Estado y la impunidad que goza el Sr. Carlos Román González ante la continua construcción ilegal pese a las órdenes de demolición y paralización de proyectos en el área.
“Esta es la segunda ocasión que manifestantes en traje de baño y desarmados son atacados violentamente en medio de una manifestación pública y pacífica. El pasado 20 de agosto del 2022 durante otra manifestación pública convocada sobre Las Cuevas Las Golondrinas un empleado del proyecto lanzó una picota de acero hacia las manifestantes en confrontación y fue retirado del área por otro guardia. Mientras tanto, la Policía de Puerto Rico había estado en el lugar y se retiró abandonando al pueblo en su reclamo”, narró Alegna Malavé, también portavoz de DCI-681.
Según Malavé Marrero, esta represión violenta a la manifestación ciudadana es una crasa violación al derecho a la expresión y manifestación pública, constituyendo una violacion a los derechos civiles en Puerto Rico. Es necesario señalar la inacción de la Policía ante los reclamos de protección de los manifestantes y la falta de intervención con el agresor de los manifestantes que portaba un arma de fuego.