Una niña de 11 años murió el domingo después de enfermarse a bordo de un avión que viajaba desde Estambul a Nueva York.
Cuando notaron que la niña estaba empeorando, miembros de la tripulación de Turkish Airlines usaron el megáfono para pedir ayuda a algún médico a bordo que pudiera atenderla.
“Nuestra tripulación de cabina hizo el anuncio en el sistema de megafonía para cualquier médico a bordo, mientras el capitán del vuelo se desviaba inmediatamente a Budapest”, indicó la aerolínea en un comunicado.
El capitán de la aeronave tuvo que realizar una parada de emergencia en el Aeropuerto Internacional Ferenc Liszt de Budapest para que la menor fuera atendida en tierra, mientras el médico a bordo intentaba salvarle la vida.
Una vez que el avión aterrizó, el Servicio Médico del Aeropuerto (AMS, por sus siglas en inglés) ingresó a la aeronave para tratar a la niña, agrega el comunicado de la aerolínea.
Los rescatistas intentaron resucitar a la menor, pero fue en vano. “A pesar de la rápida y profesional intervención, lamentablemente no se pudo salvar su vida”, dijo un portavoz del aeropuerto.
Los familiares de la niña desembarcaron del avión en Budapest, mientras continuaba su ruta hacia Nueva York, donde aterrizó con un retraso de cuatro horas y media.
“Ofrecemos nuestras más sinceras condolencias a la familia y los seres queridos y compartimos su dolor”, dijo Turkish Airlines.
Hasta el momento, no se conoce la nacionalidad ni la causa de la muerte de la niña.